sábado, octubre 29, 2005

¿QUÉ GANA CHILE EN UN TLC CON CHINA?
















Los sectores agrícola y agroalimentario son dos de los que más beneficios podrían obtener de acceder en buenas condiciones al mercado de ese país libre de aranceles, ya que hoy las barreras arancelarias para algunos productos superan incluso el 20%.
Acceder a libre de aranceles con la sexta economía mundial, con un mercado de más de mil millones de consumidores, suena tentador.Desde hace años que China (al igual que India) ha estado en la mira de los exportadores nacionales, quienes ven con ambición la opción de lograr posiciones ventajosas en las negociaciones que Chile ha desarrollado para alcanzar este TLC, aunque no todos quedarían contentos...Si bien en este tipo de negociaciones los cambios en las listas y los plazos para las desgravaciones arancelarias pueden suceder hasta último momento, ya se perfilan los posibles ganadores y perdedores de estos acuerdos.En el caso del Tratado de Libre Comercio (TLC) con China, el enfrentamiento entre el sector agrícola y el industrial ha sido con "armamento pesado".Los agrícolas, encabezados por la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), reclaman que se les está perjudicando debido a los beneficios de defensa comercial que estarían recibiendo productos industriales como los textiles y metalmecánicos.En efecto, estos últimos productos son considerados "sensibles" en la negociación nacional, mientras los chinos pidieron exceptuar de la desgravación arancelaria los televisores, el arroz y algunos productos de la madera.
China e India: La apuesta de negociar TLC con los gigantes ¿Qué productos defender y en cuáles contraatacar?
Ése es el dilema de los negociadores nacionales a la hora de enfrentarse a los acuerdos comerciales con los gigantes asiáticos: China e India.En efecto, en el caso de China, los sectores agrícola y agroalimentario son dos de los que más beneficios podrían obtener de acceder en buenas condiciones al mercado de ese país libre de aranceles, ya que hoy las barreras arancelarias para algunos productos superan incluso el 20%.Esto tiene suma importancia, sobre todo porque hoy buena parte del comercio chileno con China está representado por el cobre, que ya entra con preferencias arancelarias a ese país.Pero, ¿qué pierde Chile con China? Los sectores más expuestos son los considerados "sensibles", como textiles, línea blanca y acero, aunque el amparo del TLC dará mayor certeza jurídica al ingreso de productos de estas áreas.En el caso de India -país con el que el acuerdo negociado es sólo parcial-, las sensibilidades pasan por productos agroindustriales, farmacéuticos, textiles y plásticos. En efecto, recientemente se ha levantado polémica debido a la opción del ingreso masivo de medicamentos provenientes de ese país.El objetivo de India con este acuerdo es desgravar más del 90% del valor que actualmente Chile exporta a ese país. Sin embargo se tratará de un acuerdo modesto, ya que en 2004 Chile exportó a India apenas US$ 426 millones y, al igual que en el caso de China, buena parte de estos envíos corresponden a cobre.Sin embargo, la opción de llevar el acuerdo parcial hacia un futuro TLC abre el apetito de los exportadores nacionales, y permitirá tener aún mejor acceso para otras áreas que hoy están fuera de la lista de casi 400 productos que se está negociando.Ambos acuerdos, una vez que entren en vigencia, implicarán la reducción de la recaudación fiscal de unos US$ 100 millones al año. Ello básicamente por la eliminación de aranceles, siendo el más relevante el caso de China.

Fuente : Emol

5 comentarios:

Esther Croudo Bitrán dijo...

Leonardo:
Muy interesante...especialmente por lo de India que es lo que viene.

Legabal dijo...

Hola Leonardo, gracias por estas crónicas imprescindibles.Saludos.

Fernando Bastias Croudo dijo...

Grasias por visitarme. esta muy bueno tú blog porfabor sigue bisitandome.
se despide Fernando

JLVEGAPI dijo...

extremadamente atrasado el TLC con china!!! donde estaban nuestros economistas!!! ese TLC debia haberse firmado hace bastante tiempo, para apoder aprobechar esta racha del cobre. Por suerte la racha va a ser larga y nunca es tarde.

Anónimo dijo...

Parece un buen pronóstico. Lo que sí me inquieta, es que ya llevamos algunos años de acuerdos comerciales con grandes potencias económicas y estoy seguro de que han tenido efectos favorables en el empleo y la produción. Lo que sí echo de menos es que tuvieran algún efecto tangible en el bolsillo de los consumidores comunes y corrientes, que hasta ahora no se ha manifestado.